
Continuando con nuestro repaso a las colecciones para la próxima Primavera-Verano, le ha tocado el turno a la gran Prada.
Aunque no es, ni de lejos, una excentricidad del estilo de Gareth Pugh para el próximo invierno, en su clasicismo a Prada se le va un poco la pinza. Las líneas son estupendas, muy claras y definidas pero aportando un toque relajado y suave. El problema es, de nuevo, el color.
Es cierto que la moda para hombre no se caracteriza por ser precisamente arcoiris, pero en general todas las firmas están apostando, tanto para hombre como para mujer, por colores muy sobrios para este verano. A mí me recuerda a épocas de moda clásica, muy elegante y suave, y muy alejada de lo que estamos acostumbrados a ver en estos últimos tiempos.
La firma italiana se lanza al ruedo apostando por una gama de colores fríos, como Dior pero sin la locura transitoria del fucsia y el azul eléctrico. Negros, azules, -negros combinados con azules - mostazas, beiges, blancos y algo de gris. No encontraremos otros colores en la colección de Prada para este verano.
Como imprescindibles propone esa especie de impermeable mostaza semitransparente, y gabardinas muy ligeras, aunque esto último ya hemos visto que es una propuesta generalizada. Será que lo de vivir en la costa me tiene perturbada, pero en mi tierra en verano ni llueve ni hace frío como para llevar estos colores y estos diseños.
Sitio oficial | Prada En Mensencia | Prada, colección Otoño-Invierno 2009/2010