Las pasarelas marcaron las tendencias y a Zara le ha faltado tiempo para asimilarlas e incorporarlas a su catálogo de swimwear 2013: los estampados dominan el panorama de los bañadores esta temporada y lo hacen de todas las formas y maneras posibles. Con una paleta cromática totalmente dispar, se apoyan en los estampados geométricos para looks mucho más sobrios y disciplinados mientras que los florales prefieren un outfit más relajado, primaveral, con inyecciones de color y tendencias distendidas. Para gustos... los bañadores.
Los estampados florales siempre son bastante recurridos. Este año dejamos de lado la tendencia hawaiana y apostamos por algo más retro y vintage: flores y hojas entrelazadas con paletas más apagadas y de contraste. Las frutas o los animales pueden terminar de completar el look, jugando con las formas y las texturas.
Los estampados camuflaje y militares para looks más agresivos y austeros con una paleta cromática entre verdes oliva, caquis y beiges (nada aconsejable si aun no estamos lo suficientemente morenos como para que no parezcamos paramilitares en pleno entrenamiento de playa)...
... y como no, los geométricos para aquellos que prefieran un estilo más discreto en la piscina o en la playa: las rayas para los toques navy, el cuadro vichy para jugar con los trampantojos entre blancos y negros y el toque más infantil de los topos, sobre fondos azules y verdes, que rompen la monotonía en blanco y negro los anteriores.
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