El acne vulgaris o acné común es la pesadilla de muchos de vosotros. Veo que sólo leyéndolo, se te ha puesto cara de asqueado y no hay para menos: parece un castigo divino. Pero es algo con lo que deberás vivir hasta que se te pase: ponerte nervioso por eso sólo lo empeora.
Hemos hablado del acné en varios posts y cómo combatirlo. Hoy quisiera explicaros qué es y porqué sale este acné, los granos y el pus. Tranquilo que no es ningun castigo divino: es un castigo hormonal injusto.
La principal causa ya la sabeis todos: se sufre principalmente en la adolescencia que es cuando las hormonas se disparan, hay un desequilibrio excesivo tipo fiesta de Carnaval y en vez de resaca sale el acné. Si no cuidas el estrés, sigue y sigue durante años.
En la foto podeis ver un hermoso pelo en su folículo piloso que recibe el sebo de la glándula sebácea. Cuando se da al mismo tiempo un taponamiento (al poro le da por cerrarse) y más células muertas de lo normal, la glándula que segrega el sebo anda perdida y echa sebo a chorros formando una bola.
Ese exceso de sebo provoca, ¿os suena? Pues sí, toma grano. Ahí es donde la bacteria Propionibacterium acnes está en su salsa y prolifera, creando una inflamación en la zona (por eso duele). El sistema inmunológico lo detecta y planta cara creando pus: el resto ya lo conoceis.
Hay quien sufre de granitos pero no de pus: tiene suerte de que a la bacteria no le mole tanto su piel como la tuya. Eso depende de cada piel, no es nada que tú hagas mal. Debes mantener la piel limpia con un jabón especial pieles grasas y/o acneicas y la mascarilla de la misma linea.
La cosmética con el acné te puede ayudar mucho, sírvete de ella. Como siempre, infórmate primero de lo que vas a comprar y cómo utilizarlo. Y por lo que más quieras: no te toques la cara ni hagas explotar los granos.
Foto | ehealthandbeauty.com, Wikimedia
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