Playa, piscina, montaña, terracitas y sol, mucho sol. Llega el verano y no paramos en casa, en cualquier lado mejor que aquí, hay que quitarse el color blanquecino que se ha quedado con el paso de los meses y volver a recuperar ese tono bronceado que tanto nos favorece.
Y como casi todo en la vida, el sol tiene su parte mala, al igual que la parte positiva que vimos ayer. Actúa como un potente acelerador del envejecimiento de la epidermis (capas más externas de células de la piel) y aumenta la probabilidad de padecer cáncer, pero la naturaleza es sabía y nos pone a su disposición alimentos que nos ayudan a combatirlos.
Elige tu forma ideal de mantener una dieta rica en antioxidantes, prevén el riesgo de cáncer y mantén tu piel más joven por más tiempo.
- El colorido y variedad en tus ensaladas serán una buena fuente de vitamina C, un nutriente esencial implicado en procesos antioxidantes, en numerosas rutas metabólicas y además intensifica el bronceado.
Lo podrás encontrar en el pimiento, patata, zanahoria, pepino, maíz y muchos más. Si lo tuyo son las comidas ligeras está es una buena elección.
Si lo tuyo son más los zumos o sopas frías no te preocupes, los cítricos como naranjas, limones o pomelos son muy ricos también en vitamina C, además de otras combinaciones como el gazpacho y el jugo de tomate. Una buena idea para refrescarte a media tarde en una terracita.
La fruta de temporada también es un buen aliado contra esta lucha veraniega además de potenciar el bronceado.
Es muy rica en vitamina E, un nutriente antioxidante que actúa a nivel de los glóbulos rojos. Si tu opción es la montaña los frutos secos también son una fuente importante de esta vitamina además ser la fuente de energía de necesitas.
Siempre se dice que para gustos están los colores, pues para los riesgos están los remedios, busca la manera que más te convenga según tus preferencias y lugar donde te encuentres y no dejes de lado la salud.
Fotos | Night86mare, Júbilo-Haku, Jasmic, Mink En Mensencia | La cara del verano: los beneficios del sol