Para algunas celebrities el estilo viene después del talento particular, sea la interpretación o la música, y deben esforzarse por encontrarlo; para otros, forma parte de un talento más completo, el del encanto frente a las cámaras dentro o fuera de un estudio, en la vida pública y en la privada. El caso de Teophilus London es el de otras estrellas como Mick Jagger o Elton John, artistas que desde que empiezan llevan su creatividad a todas las dimensiones de su vida, cada uno a su manera, también y especialmente a la del vestir.
Este rapero de Brooklyn debutó el año pasado con Timez Are Weird These Days, con una muy respetable colección de temas de hip hop alternativo. Pero más allá de la música, o complementándola, London ha conseguido asegurarse un hueco destacado en la escena contemporánea gracias a un sentido del estilo tan atractivo que firmas como Tommy Hilfiger ya han decidido ficharlo como imagen de marca.
Teophilus London, que con tan connotado nombre ya debía saber que algún día sería alguien, se ha convertido en apenas unos meses en un referente musical y estético (¿se puede ser lo primero sin lo segundo hoy en día?) gracias a ese objeto de propiedad intelectual tan ambiguo pero real que solemos calificar de estilo propio. En el mercado de la música negra sobran dólares como para habituarse a grandes firmas, ostentosas prendas y accesorios extravagantes, pero eso es algo a lo que ya estamos más acostumbrados.
Lo que resulta nuevo es que un rapero neoyorquino consiga situarse a medio camino entre la actitud callejera y dorada de sus compañeros de barrio y la pose más fría y sutil de la escena indie internacional. London no renuncia al oro, las pieles y el broche extravagante, pero lo complementa con artículos de moda tan originales que hacen pensar que este chico sabe perfectamente lo que se hace.
Su firma personal se compone de gafas de sol en varias manifestaciones: maxi, de pasta, carey, oscuras, transparentes y con predilección por el barroco diseño Persol; trajes de chaqueta negros y azul marino muy entallados, camisas abotonadas y por dentro del pantalón rollo nerd, preferencia por tejidos denim y de piel y cabeza cubierta por una gorra de béisbol o, mejor aún, un sombrero negro de ala muy ancha.
En septiembre del año pasado y viendo su talento fashionista, Tommy Hilfiger nombró a London como uno de sus Kids of America, un grupo compuesto por figuras de popularidad más o menos local (Nueva York) encargado de presentar la última colección vaquera para el otoño. El rapero ejerció de imagen impecable para varias de sus fiestas, conjuntado de arriba abajo de denim y piel de borreguillo.
Las imágenes que aquí os mostramos os ayudarán a entender por qué estamos ante un nuevo icono del estilo masculino, pero si os apetece conocerle mejor, sus videoclips no sólo contienen buena música sino una selección de artículos de moda masculina y energía cool muy envidiables.
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