Y el estilo de la semana recae hoy en un actor y modelo, que levanta pasiones allá por donde va: Ashton Kutcher. Joven, guapo, comprometido con causas sociales y pareja de la archideseada Demi Moore es uno de los chicos con más tirón de Hollywood. Ahora descubriremos por qué.
La característica que mejor define su estilo es versátil y camaleónico, lo mismo está perfecto con un traje de chaqueta sobre una alfombra roja que con unos vaqueros y deportivas en un partido de balonesto. Eso sí, todo con un toque casual, que combina a la perfección con su juventud.
Y es que su estilo gana cada día más adeptos, y de hecho se considera uno de los hombres mejor vestidos del momento por las revistas masculinas. Para las fiestas y estrenos de películas escoge traje de chaqueta oscuros, que combina con camisas también oscuras, siguiendo las últimas tendencias pero sin perder la elegancia de un buen traje.
Al actor le encantan los complementos y no pierde la ocasión para completar con ellos su look. Entre sus favoritos encontramos gorros, gorras y boinas, y si la cita es en un evento nocturno pajarita o foulards (pero no en plan Jaime de Marichalar, que aunque es muy elegante su look es discutible).
En el día a día, el modelo opta por la comodidad y los vaqueros y pantalones cargo son un indispensable. Los acompaña de camisetas amplias y deportivas a la última.
Por la noche, cuando sale de copas en rollo informal, también elige vaqueros y deportivas, pero los combina con americanas y jerseys de punto o camisas.
El único defecto que le veo (con permiso de sus fans) es que a veces ha intentado tener un look casual cuando la ocasión no la requería. Es decir, que por el dress code se requería traje y le ha intentado dar su toque con una corbata anudada mal o sin peinarse. Una pena, porque siempre triunfa o desaliñado o arreglado, pero en este caso los términos medios no son adecuados.
Respecto al pelo, Kutcher tiene dos peinados clave: corto con raya o bien media melena. Ésta le permite dar un toque desaliñado a su imagen, combinándola con barba de dos días (o más). O bien la “engomina” para saraos más formales. Sin duda, le queda genial.
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