No tengo muy claro que este año vayamos a tener una buena temporada de nieve. Porque esto de estar en Madrid a 7 de octubre y alcanzar los 30 ºC a mediodía es un tanto sospechoso. De todas formas ya empezamos a tener las novedades que las marcas especialistas en complementos de nieve están lanzando para esta temporada. Como son las nuevas Splice de Oakley.
En estas nuevas gafas se pone de manifiesto la importancia del diseño pero también de la innovación tecnológica. De hecho no conozco un deporte donde estas dos vertientes se den la mano de una forma tan innovadora.
Por un lado la innovación tecnológica de las gafas han ido hacía el lado de la comodidad. Están fabricadas con un material llamado O Matter que es flexible incluso con una temperatura muy fría. Además juran y perjuran que estas gafas no hacen daño en la nariz, algo que muchos esquiadores echamos de menos en muchas gafas.
Por otro lado, la comodidad también se refleja en un sistema de espuma que reparte la presión por toda la superficie de contacto con la cara, haciéndolas así mucho más ergonómicas.
En el aspecto del diseño óptico, dispone de una óptica que premia la visibilidad hacia abajo con un nuevo contorneado de la lente. Y a su vez permite una correcta visión lateral y periférica. En cuanto a que se empañen, nos dicen que es bastante difícil puesto que tiene un sistema antiniebla además e diversos filtros contra rayos ultravioletas.
Ah, y además cuentan con accesorios para personalizar a la medida de cada uno las monturas. A mi me gustan bastante. Aunque reconozco que es algo muy personal y muy unido a la nieve.
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