Hablamos muchas veces del fondo de armario, de la necesidad de tener una serie de prendas básicas infalibles que nos salven de cualquier circunstancia. Efectivamente, esto es fundamental. En cambio, salvo excepciones, no prestamos la importancia que se merece a la organización del mismo. En este especial nos centraremos precisamente en cómo colocar la ropa, consejos para que mantengas el orden y, además, algunos trucos de almacenamiento y doblado de prendas. Y es que, para vestir bien, por qué no empezar por un armario perfecto.
Revisión exhaustiva de armario, ¿nos sirve todo?
Hacer una revisión de armario exhaustiva y deshacerte de las prendas que no te pones, es lo primero de todo. Seguro que no te has parado a pensar la cantidad de ropa que tienes almacenada en tu armario, ¿te la pones toda?, dudo mucho que sí.
Vacía tu armario al completo y revisa tus prendas una por una separando en dos bloques, las que conservamos y las que no. Si una prenda no te las has puesto en el último año, dudo mucho que lo hagas en un futuro, a no ser que sea algo muy especial. Las que estén en mal estado, rotas e imposibles de arreglar, asúmelo, deben ir a la basura directamente, sé que cuesta, a muchas prendas se les coge cariño, pero todo es ponerse.
Con las prendas descartadas puedes probar dos casas. Una, venderlas a través de internet. Con la proliferación del fenómeno vintage abundan las webs especializadas donde se puede hacer compra-venta de ropa usada (en este otro especial te dimos unas cuantas direcciones).
Dos, existen diversas organizaciones benéficas que recogen prendas, te harás un favor a ti y a alguien que realmente las necesite. Empresas como Rastro Solidario te permiten vender prendas y decidir qué importe quieres donar a varias ONG. Tú eliges la organización y el porcentaje a donar. También las puedes dejar directamente en los contenedores verdes de Humana.
Empezamos a ordenar: La división por temporadas
Hacer dos cambios de armario al año es fundamental para tener el armario perfecto. Uno en primavera y otro en otoño sería lo correcto. En otoño, debemos guardar las prendas más frescas que no vamos a utilizar en esta temporada. En primavera, todas las prendas más gruesas y las piezas de abrigo.
Lo ideal sería sacar las piezas que no usemos en la temporada vigente y colocarlas en un armario auxiliar. Si no te es posible, sí que puedes organizar priorizando, es decir, dejando a mano las que más usas dependiendo de la estación.
Una vez realizado el cambio de temporada, utiliza siempre fundas de percha para trajes y abrigos, y fundas transparentes para el doblado como las que te muestro en imagen, éstas son perfectas para dejarlas bajo la cama, por ejemplo, y así ganar espacio. Guardando la ropa que no te pones de otra temporada, y al no estar a la vista, ganarás tiempo ya que te centrarás en la temporada actual y, además, la conservarás en perfecto estado.
Organizar las prendas por grupos de producto
Lo mejor para tener un armario perfecto es organizarlo por grupos de producto. Con esta técnica será mucho más fácil que encuentres la prenda necesaria en todo momento. Lo primero es separar el doblado del perchado como si de una almacén profesional se tratase. Te recomiendo doblar sólo las camisetas y el punto, el resto (camisas, trajes, pantalones y abrigos) irá siempre perchado. Nunca perches nada de punto, con el tiempo acaba deformándose.
A continuación, lo idóneo, es agrupar las prendas por familias en bloques. Bloque de camisas, bloque de punto, bloque de chaquetas, etc. Dentro de este orden, puedes hacer subgrupos, por ejemplo, chaquetas sport, chaquetas de vestir, etc.
Además, te recomiendo organizar por colores, y en escala de tonos de claro a oscuro. Puedes seguir este orden; blancos, tonos tierra, azules, grises, colores intensos (rojo, verde, amarillo, naranja, que suelen ser los menos) y terminar con el negro. Si además separas los lisos de los estampados darás un extra de claridad y organización a tu armario. Este orden visual de armonía cromática hará que te vistas más a gusto.
Fotos | Vera Reyes, Ikea, Aki,
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