A través de los muchos comentarios que aportais al blog, se nota que los gustos de la comunidad de usuarios en Mensencia es muy variada. Algunos mensencios tienen gustos sofisticados y es posible que hayan probado la fragancia masculina Opium pour homme de Yves Saint Laurent.
No es una novedad, no es el estereotipo de perfume que usan los españoles. Pero tras el post del cuestionario Osmoz sobre perfumes, me satisface saber que hay muchos candidatos a perfumes clásicos de la familia Oriental.
Opium es una de las fragancias clásicas de YSL y es muy conocido por la versión femenina. La masculina, creada en 1995 por Jacques Cavallier, no lo es tanto pero se merece una atención especial. Por su calidad y por su extrema personalidad, ideal para el hombre que busca un perfume fuera de lo corriente y sin importarle las modas olfativas.
Familia: un Oriental Fresco
Si te gustan los aromas de especias y maderas, podría convertirse en tu próximo perfume. Lo vas a tachar de la lista si eres de fragancias verdes y frescas: te va a parecer demasiado fuerte. En realidad es intenso, como la mayoría de los orientales.
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Notas de cabeza: Anís estrellado, Grosella negra.
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Notas de corazón: Galanga chino, Pimienta de Sichuan.
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Notas de fondo: Cedro del Atlas, Vainilla de Bourbon, bálsamo de Tolú.
Sin pimienta, no hay Opium. Si lanzaran un Shalimar pour Homme en Guerlain, apuesto a que también contendría pimienta. Es el toque especiado que le da chispa, muy penetrante. Si quieres averiguarlo en casa, huele tu tarro de pimienta. Junto a la evocación oriental, de ahí el nombre que evoca a la droga.
La grosella y el anís estrellado dan el frescor de salida hasta que aparece la vainilla, inconfundible. La vainilla es la nota que hace que un perfume sea pesante, con cuerpo, casi empolvado. A los franceses les encanta.
Mi sensación olfativa
En cuanto lo probeis, estareis de acuerdo conmigo que es una fragancia sofisticada, profunda, penetrante, ... yo añadiría deliciosamente sensual. No es tan fuerte como pudiera parecer con los ingredientes de maderas y especias pero no pasa desapercibido: lejos de eso. Pero no os imagineis ir dejando rastro aunque su fijación sea muy buena. De las que quedan en la ropa incluso al día siguiente.
Es para un hombre que no quiere oler como todo el mundo. Es muy masculina y la vainilla le da un toque refinado que me encanta. No es para alguien de gustos sencillos, cuadra con una persona que ha vivido y puede contarte experiencias personales interesantes. Que sea un clásico de la perfumería no lo hace antiguo ni mucho menos. Es la típica fragancia que definimos como muy perfumada.
Es una eau de toilette que evoluciona bastante cuando la pruebas. No tengais prisa en juzgar: saboreadla con paciencia. El picor de la pimienta en la nariz disminuirá enseguida. Al cabo de cinco minutos, es igualmente deliciosa sin la fogosidad del principio. Me encanta este perfume.
A qué hombre lo regalaría
No la regalaría a un joven ni a un hombre que vistiera de forma muy informal o sport. Le va mejor a alguien de estilo elegante y mirada misteriosa, que domina sus impulsos pero es apasionado. Ese halo misterioso de los viajeros a los que les gustan los destinos cálidos y lejanos.
No creáis que me he dejado influenciar por la descripción de la marca. Lo que ocurre es que han plasmado la idea en el perfume de una forma irreprochable. Es cierto que huele a misterio, al lejano oriente, a madera y especias. Es un oriental fantástico y hace al hombre que lo lleva muy atractivo y sensual. Mi consejo es que lo lleveis la noche que salís a impresionar y seducir.
Más información | YSL Parfums
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